La investigación, que se llevó a cabo con gran discreción, reveló que los primeros ciudadanos extranjeros detenidos en el lugar no coincidían con los señalados por las víctimas. Según se determinó en la sede policial y en la Fiscalía, los sospechosos principales habían abandonado el lugar antes de la llegada del personal policial.
Las detenciones fueron ordenadas por el Juzgado de Garantías 1, a solicitud de la fiscal penal Luján Sodero Calvet, quien dirige la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual (UDIS). La investigación se inició a partir de una denuncia por promoción de la prostitución, presentada por la madre de una joven de 18 años y una menor de 13 años.