En la jornada del 14 de febrero se llevó a cabo un recorrido por la ciudad de Tartagal con el fin de recordar y enseñar a los participantes del tour la historia de Tartagal. Fue una experiencia abierta a todo público y de manera gratuita, CANAL 12 dialogó con algunos de los asistentes y con el guía turístico Víctor Claros.
Esta experiencia tuvo un carácter dialogal, puesto que muchos de los participantes son personas mayores que comentaban y recordaban desde sus experiencias cómo era la ciudad antes.
Este tour estuvo guiado por Víctor Claros, que inició en la casilla de Turismo o Centro de Atención al Visitante, ubicada en la plaza central, esquina Rivadavia y San Martín, y se desplegó por alrededor de las calles del casco céntrico.
En el recorrido estuvo presente la explicación acerca del origen de Tartagal, los recursos económicos en cuanto a su creación, como así también cuándo se creó el puente, la estación, entre otros lugares y acontecimientos importantes.
“El recorrido fue bueno y enriquecedor porque nos encontramos con gente mayor, intercambiamos ideas… Fue lindo el encuentro y la convivencia, en compartir ideas y recuerdos de nuestra ciudad”, dijo el guía Víctor Claros.
Varias personas participaron de esta gran experiencia, entre ellas, María Arias, quien comentó que esto fue “un momento hermoso, recordamos cosas muy lindas, recordamos todo lo que hemos vivido”. También manifestó recordar muchos de los negocios de la época y cómo la gente vivía en aquél entonces. Donde la atracción era ir a la plaza, los domingos, todos a la iglesia, como así también recordó las fiestas patrias que se ejecutaban alrededor de la plaza.
Además, destacó una de las grandes visitas que recibió la ciudad como fue el caso de Tusam, un mago con fama a nivel nacional e internacional. Fue mentalista e hipnotizador argentino que podía tragar lámparas incandescentes y lámparas fluorescentes encendidas, sugestionar animales, masticar vidrios, introducir un sable en su boca, ensartar agujas en la carne o clavar clavos en el cuerpo, y podía hacer levitar a las personas, entre otras habilidades más.
Y por último, Arias destacó que le llama la atención que en la ciudad no hayan realizado algún homenaje en honor al Dr. Tomás. Y recordó a las monjitas antiguas que acudían al hospital a atender a los pacientes mientras esperaban su turno, con calmantes, vasos de agua, sin distinción alguna.
