Más de una docena declaran patrimonios de más de nueve cifras. Son DDJJ a diciembre por lo que los ahorros en dólares se calculan a $ 84. La mayoría le ganó a la inflación.
La información surge de un relevamiento que realizó el diario EL PERFIL sobre las declaraciones juradas correspondientes a 2020 que presentaron los legisladores tanto del Senado como de Diputados a la Oficina Anticorrupción.
Alperovich es quien ganó el podio de los más ricos, y no renovará su banca, que vence en diciembre, tiene declarado medio centenar de propiedades ubicadas mayormente en la provincia de Tucumán, además de unos US$ 6 millones depositados en el país, que para el cálculo del patrimonio son tomados a una cotización oficial de $ 84 al 31 de diciembre de 2020. Closs, por su parte, engrosó su patrimonio durante 2019 con el fallecimiento de su padre y la posterior herencia del Grupo Económico del Valle, que le permitió hace un año un engrosamiento del 800% de sus posesiones
En el Senado, también figuran en el ranking el salteño Juan Carlos Romero, que subió una posición respecto al relevamiento realizado el año pasado con $ 182 millones, aun con un descenso del 15%, seguido por el sanjuanino Roberto Basualdo, con $ 175 millones, quien también sufrió una depreciación del 58% respecto a la declaración jurada anterior. Lo siguen el radical Martín Lousteau, Juan Mario Pais, senador por Chubut, que abandona su banca a fin de año; Roberto Mirabella, del Frente de Todos de Santa Fe; Sergio “Oso” Leavy, de Salta, y Lucila Crexell, referente del Movimiento Popular Neuquino.
En Diputados, el empresario del sector agropecuario Atilio Benedetti se quedó con el primer lugar, con una fortuna valuada en $ 491 millones, lo que representa un incremento del 47% respecto a lo declarado en 2019. El grueso de su patrimonio corresponde a las acciones que posee en la empresa Tierra Greda, con sede en la ciudad entrerriana de Larroque, que se dedica a la actividad agroindustrial.
El segundo lugar quedó para el presidente del bloque de Diputados del Frente de Todos, Máximo Kirchner, con un patrimonio de unos $ 400 millones y un incremento del 37% con respecto al año anterior.
En el detalle de su declaración figura que el hijo de la vicepresidenta Cristina Kirchner tiene 27 ítems bajo la categoría “Inmuebles en el país”, ubicados en su mayoría en El Calafate y Río Gallegos, y que corresponden al concepto de “herencia”, a excepción de dos que fueron obtenidos con “ingresos propios”. Tanto los inmuebles como las acciones en empresas como Los Sauces y Hotesur ingresaron al patrimonio de Máximo Kirchner en 2011, unos meses después del fallecimiento de su padre, Néstor Kirchner, y de la división de bienes con su hermana, Florencia.
En el tercer lugar en Diputados se encuentra José Ignacio de Mendiguren, el referente cercano a Sergio Massa que también se encuentra en uso de licencia porque está al frente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) desde la llegada del Frente de Todos a la Casa de Gobierno. El ex titular de la Unión Industrial Argentina (UIA) tiene declarado un patrimonio de $ 375 millones, lo que conforma un incremento del 50% comparado con el año anterior.
En Diputados, en tanto, aparece la representante de la UCR Evolución en la Ciudad de Buenos Aires, Ana Carla Carrizo, con $ 249 millones y un incremento del 47% respecto a 2019, seguida por el jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, que declaró $ 126 millones al 31 de diciembre de 2020, y luego otra referente del PRO, la vicepresidenta de la Comisión de Salud, Carmen Polledo, con $ 117 millones.
La lista la completan la santafesina del Frente de Todos Laura Castets, el radical Gustavo Menna, Laura Russo (FdT-Buenos Aires) y Álvaro González, del PRO de la Ciudad de Buenos Aires.
Fuente: El Perfil