
Foto: Dave J Hogan / Getty Images
Cuando llama desde Londres un martes a la tarde hace poco, Matt Healy, de The 1975, está disfrutando su versión de un día libre: paseó a su perro, pasó un rato con su hermano menor y ensayó con su banda para la próxima parte de su tour. The 1975 está de gira sin parar desde que su debut de 2013 -un disco repleto de canciones confesionales sobre drogas, sexo, más drogas, y aún más sexo- se volviera un éxito sorpresivo. El siguiente, I Like It When You Sleep, for You Are So Beautiful Yet So Unaware of It, del año pasado, alcanzó el puesto Número Uno en Estados Unidos. La banda empezó a tocar hace 14 años, pero tuvo que pasar una década entera antes de que editaran algo -afortunadamente, ya superaron su período emo-. "De los 13 a los 24 años, pasamos todos los días juntos con mis compañeros de banda", dice Healy, "más tiempo que el que pasás con tus hermanos de verdad. Se volvió el núcleo de nuestro grupo social. La gente se identifica con nosotros porque somos una banda de verdad, y amigos de verdad".
Tus padres son personalidades conocidas de la TV en Inglaterra. ¿Eso te jugó en contra, en el sentido de que todo el mundo asumió que habías tenido una ventaja tremenda a la hora de insertarte en la industria de la música?
Tuve que superarlo muy rápido, o de lo contrario iba a ser muy peligroso para mi ego. No podés andar juzgando a la gente en base a los prejuicios que tenés sobre cómo son sus padres. Si la gente con padres que trabajaron en la TV tuviera la llave para sacar un disco Número Uno, yo estaría escribiendo un libro sobre eso, y sería millonario. Por suerte, es completamente diferente en Estados Unidos. Es gracioso estar acá porque yo soy famoso y mi mamá no.
Te gusta elogiar a artistas de los 80 que no son muy respetados por la crítica, como Phil Collins.
Obvio, me encanta Phil Collins. Siempre volvemos a los 80 cuando hablamos de nuestro disco. Me parece que el pop no estaba tan cargado de autoconciencia, ni cinismo, ni de miedo a no ser cool. Y eso es algo que siempre vamos a tratar de invocar.
Pasaste mucho tiempo en Estados Unidos durante los últimos tres años. ¿Cómo se compara con lo que te imaginabas antes de llegar?
La verdad es que es tal cual me lo esperaba, pero con más panceta. En un festival de comida en Chicago, me comí una hamburguesa con panceta recubierta de azúcar y dos donas Krispy Kreme en lugar del pan. Si estás fumado y tenés 16 años, puede que esté bueno, pero yo no pude pasar de un mordisco.
¿El porro es mejor en Estados Unidos?
Absolumente. La variedad kush en California es una locura. Siempre supe que el porro era mejor en Estados Unidos, pero nunca me imaginé que era tanto mejor. Los porros son tan grandes que parecen caricaturas.
¿Hay alguna droga que hayas probado una vez y te hayas dado cuenta de inmediato de que había sido un error terrible?
Sí, ketamina. Fue una pesadilla. Me sentía como si hubiera tomado tres botellas de vodka.
Cuando googleás tu nombre, aparecen muchas historias sobre vos y Taylor Swift, aunque la viste sólo una vez, y ella tiene una remera de The 1975.
Dije en una entrevista que nunca salimos, y un tarado como Perez Hilton lo sacó de contexto y lo hizo parecer como que yo estaba diciendo algo ambiguo. Ella vino a uno de nuestros shows, y era como si hubiera venido Barack Obama. No conozco a otra persona en el mundo que pueda despertar esas reacciones. Quizás Kanye, pero ni siquiera. Y ahora ellos dos son como la misma persona en la imagen pública. Es raro.
Como líder de una banda que tiene un disco en el Número Uno, ¿cómo reaccionás cuando gente como Gene Simmons dice que el rock está muerto?
Lo que está muerto es la época de ser una estrella de rock sin ningún tipo de autoconciencia, esos están muertos. La época de hacer lo que quieras y que te glorifiquen igual también está muerta. Gracias a Internet, todo el mundo tiene el número de todo el mundo. ¿Cómo hacés para salir y ser Jim Morrison? El mundo no lo va a permitir, así que [el estrellato] necesita incorporar la humildad y la autoconciencia. O, en mi caso, algo de rareza.
¿Pensás que alguna vez vas a hacer un disco solista?
No. O sea, no es que los chicos son un obstáculo para mí. Creo que esas cosas pasan cuando la gente necesita otra vía creativa. Yo simplemente podría hacer un disco nuevo de The 1975, pero que sonara distinto.
Sos fan de tocar sin remera. ¿Cómo decidís si vas a usar o no una remera?
Es algo práctico: durante los recitales hace calor y no querés tener toda la ropa transpirada mientras estás viviendo en un micro de gira. Aunque en el último tiempo hemos progresado bastante en el mundo, y ahora puedo mandar las cosas a la tintorería después de los shows.
Elegiste tocar en cuero en Saturday Night Live.
Quería ser particularmente desagradable esa noche. Pensé que estaba siendo post-irónico y subversivo, pero resulta que la gente en Kansas pensó que yo era un tarado.
Andy Greene