Como reglas de conducta, la magistrada impuso a R.S.S. fijar domicilio y someterse al cuidado del Patronato; no cometer nuevos delitos; y la prohibición de acercamiento a la menor víctima, a su domicilio y los lugares que frecuenta. Todo ello, por el término de dos años y bajo apercibimiento de revocarse la condicionalidad de la pena impuesta, en caso de incumplimiento injustificado.
Toledo Zamora también dispuso que una vez firme la sentencia, el Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales extraiga material genético al condenado para su posterior inscripción en el Banco de Datos Genéticos, previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG). En el mismo sentido, ordenó que el Servicio Médico del Distrito Judicial de Orán realice el examen físico del condenado para su identificación integral, fichas dactilares y señas particulares. Finalmente, ordenó su inmediata libertad.
La denuncia fue radicada en Hipólito Yrigoyen por la tía paterna de la menor víctima (14), en julio de 2017. El acusado es padrastro de la adolescente, quien narró a su tía que el hombre la tocaba desde que tenía cinco años.
Fuente: Poder judicial de Salta