Policiales | Investigación | villa El Sol Otro policía requerido a juicio por matar a una persona
01 de diciembre 2016 – 01:30 Se trata del cabo Nicolás Valdiviezo, perteneciente al 911. Está acusado de homicidio calificado tras la muerte de un menor de 16 años.
{[ caption ]}{[copyright]} {[ caption ]}{[copyright]} {[ caption ]}{[copyright]} {[ content ]} {[ caption ]}{[copyright]} {[ caption ]}{[copyright]} {[ titulo ]} {[ epigrafe ]} {[ copyright ]} Más de siete meses pasaron desde que un efectivo de la motorizada perteneciente al 911 le disparara a un joven de 16 años en "La Laguna", un baldío en el barrio 20 de Junio. La mañana del 14 de abril, Nicolás Sebastián Valdiviezo persiguió e interceptó a Braian Nahuel Márquez. Según la investigación, luego de alcanzar al menor comenzó a golpearle la cabeza contra el piso. Apareció la madre y la novia del joven y trataron de sacarlo de las manos del policía. Márquez, apodado Pochocho, sacó un cuchillo y se lo clavó en la pierna al uniformado quien de inmediato desenfundó su arma y le disparó.Pablo Rivero, fiscal penal que atiende la causa, de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, remitió a juicio la causa contra el cabo de la Motorizada por "homicidio calificado por su función de personal policial agravado por el uso de arma de fuego". Esa jornada el imputado junto al agente Alberto Sebastián Cegarra patrullaban la zona por inmediaciones de la calle Samuel Quevedo, en villa El Sol. En determinado momento demoraron a Jorge Emilia "Serafín" González.La intercepción del joven se realizó cerca de un callejón que conduce a La Laguna de la Cerámica. Según fuentes de la investigación, de manera sorpresiva apareció el joven Márquez para agredir a los policías y ayudar a liberar a su amigo, quien logró zafarse y salir corriendo. Cegarra reaccionó a tiempo y capturó a Serafín, mientras Valdiviezo salió en busca de Márquez. Justo en inmediaciones del baldío conocido como La Laguna, el policía logró interceptar al menor. En ese momento, según testigos del hecho, comenzó a golpearle la cabeza contra el suelo.
Hipótesis criminal
Desde la Fiscalía Penal a cargo de Rivero surgieron varias pruebas que fundamentarían la "hipótesis de un crimen". Entre los testimonios se recolectó el de la familia, el propio González y hasta de algunos policías quienes habría comprometido la situación de Valdiviezo. Además de sumar otras pruebas tales como una serie de pericias médicas realizadas por el Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) que echarían luz sobre un aspecto clave del hecho.Si bien la defensa del policía insistió en la hipótesis de que el disparo fue "accidental", que ocurrió en medio de un "forcejeo" entre el menor, el imputado y familiares del adolescente, sobre esta teoría la fiscalía probó que el disparo se efectuó a una distancia superior a los 50 centímetros. Entre otros datos, el reporte de la autopsia también confirmó que las lesiones dejadas por la bala coinciden cuando el disparo se realiza a corta distancia.
"Decidió ir sin refuerzos"
El fiscal Pablo Paz expresó que Valdiviezo "decidió ir en persecución del menor Márquez, solo sin refuerzos, a sabiendas de que el predio de la laguna es un sector peligroso. Lo alcanzó y lo redujo mientras le golpeaba la cabeza contra el suelo", hecho que motivó la intervención de familiares del joven, "el imputado extrajo su arma reglamentaria, apuntó al menor quien ya se estaba escapando y remontó el arma, accionando el mecanismo de disparo", expresó el fiscal. Con dicho accionar, el acusado "demostró su clara intención homicida", aseguró Pablo Rivero.
Una madre desesperada
Pasado el mediodía, Delia, madre del menor, notablemente conmocionada, responsabilizó a uno de los uniformados de la Motorizada por lo ocurrido. Tras intentar ver a su hijo y no poder, la mujer le dijo a El Tribuno minutos después de lo sucedido: “Siempre hacen lo mismo, no puede ser, vienen al barrio y empiezan a los tiros, esta vez me lo mataron a mi hijo”.En ese momento El Tribuno, además de hablar con la madre del joven baleado por un efectivo, también tuvo contacto con vecinos cercanos a La Laguna, quienes al igual que la mujer negaron que se haya tratado de una emboscada. “Es mentira que mi hijo los emboscó a uno de ellos, mentira, cómo pudo haber hecho eso un chico de 16 años”, apuntó Delia.
Aparecen
Cargar más comentarios…