Luego de quedar detenido el 22 de diciembre y de pasar las fiestas en el penal bonaerense de Marcos Paz, imputado por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante y corrupción de menores, Cristian Aldana fue procesado por el juez de instrucción Roberto Ponce. Además, se dispuso un embargo de sus bienes en 2.500.000 de pesos.
Antes del final de 2016, el juez evaluaba avanzar con el procesamiento del cantante de El Otro Yo. "Sabiendo de su condición de ídolo musical de las víctimas menores de edad y, en aprovechamiento de la adoración que éstas le dispensaban, como así también de su inmadurez sexual, las forzó a mantener relaciones sexuales con él en forma violenta e intempestiva", fue el argumento que dio para rechazar el pedido de excarcelación presentado por el abogado de Aldana.
Carolina Luján estuvo en pareja entre los 14 y 19 años con el ex líder de la UMI (Unión de Músicos Independientes) y fue la primera en denunciarlo. A partir de su testimonio, aparecieron más mujeres que declararon haber sufrido abusos y contaron lo que habían vivido en la página de Facebook Víctimas de Cristian Aldana. Tras realizar una investigación preliminar y unificar las denuncias que había en su contra, en mayo la UFEM (la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres) formalizó la denuncia contra el músico.
Según las pericias psicológicas a las que accedió el juez Ponce, las denunciantes presentaron "indicadores de trauma complejo" y "trastorno por estrés pos traumático extremo" a raíz del vínculo que entablaron con Aldana cuando eran adolescentes. Felicitas Marafioti, una de las denunciantes, conoció al músico por chat cuando tenía 13 años. Perdió la virginidad poco después, en una orgía organizada por el cantante de EOY con ella y otras tres menores. En una entrevista con Rolling Stone, Felicitas recordó el momento en que, años después, tomó conciencia de la situación de abuso que había vivido en su adolescencia: "Me daba asco todo lo que sentía en mi cuerpo", dijo. "Sentía que no me pertenecía, que era el cuerpo de los demás."
Según pudo saber ROLLING STONE, Horacio Rivero dejó de ser el abogado de Aldana el 2 de enero "por cuestiones personales". Su nueva defensa hizo otro pedido de excarcelación. La Sala A de la Cámara del Crimen debe decidir si sigue detenido o si recupera su libertad mientras avanza el proceso judicial.