Este domingo 21 de abril la Copa de la Liga se viene con todo, porque River se enfrentará a Boca en los cuartos de final de la Copa de la Liga 2024 a las 15.30 en Córdoba.
Se tenía previsto que el enfrentamiento sea en el Estadio Mario Alberto Kempes, que recientemente fue resembrado y luce un estado preocupante, por lo que la AFA analiza la chance de cambiar de sede: todo se define en una reunión este mediodía. Mientras, el ingeniero a cargo aseguró que llegará en óptimas condiciones.
¿Qué se juegan Diego Martínez y Martín Demichelis en este Superclásico?
Con apenas un poco más de cuatro meses capitaneando el barco azul y oro, a DM se le presenta la prueba de fuego más contundente. No será su primer Super (empate 1-1 en el Monumental por la Liga Profesional), pero sí que será diferente: acá no hay margen de error, no hay tiempo para recuperarse, porque una derrota implica un despedida prematura.
Es atinado decir que, si bien no será determinante para su futuro dado que es un proyecto que recién empieza y en el que Juan Román Riquelme confía a pleno (por eso lo fue a buscar con tanto énfasis a pesar de que estaba dirigiendo a Huracán), lo que pase en Córdoba puede ser un punto bisagra: un trampolín o un cimbronazo del que le costara levantarse.
Por el lado de Núñez, Demichelis camina una ruta distinta pero que lleva a un destino similar. El DT, cuestionado por un sector de los hinchas y con algunas decisiones tácticas que lo pusieron bajo la lupa, sabe que un duelo de eliminación directa contra Boca puede colaborar a mejorar decisivamente esa imagen con los riverplatenses; y también a hacerle crecer una espalda que se fue achicando con el paso del ciclo, que ya tiene más de un año.
Es cierto que en los últimos partidos River levantó, y claro que gracias a eso también se ganó ser el primer clasificado de la Zona A. El equipo llega mejorado y Micho más aplomado, pero todavía sin esa confianza desde el afuera que sí le hacen llegar los dirigentes puertas adentro. Se la puede ganar o, al menos, sumar crédito. En cambio, una eliminación lo dejaría tambaleando y con la necesidad de hacer un papel casi perfecto en la Copa Liberadores.