El juez Anastasio Vázquez Sgardelis, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio de Tartagal, condenó J. B. P. (73) a la pena de doce años de prisión de ejecución efectiva por ser autor del delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo y la convivencia; y abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y la convivencia, en concurso real en perjuicio de una A. F. P.; y del delito de abuso sexual gravemente agravado por el vínculo y la convivencia en perjuicio de I. C. P..
El hombre continuará detenido bajo la modalidad de prisión domiciliaria.
L. M. P. (23) fue condenado en la misma audiencia a la pena de ocho años de prisión efectiva por ser autor del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y la convivencia.
El joven continuará detenido en la cárcel local.
Además se ordenó la extracción de material genético de los dos condenados para su inscripción en el Banco de Datos Genéticos.
J. B. P. es abuelo, mientras que L. M. P. es hermano de ambas víctimas. El hecho sucedió en Aguaray.
Nota: Se omitió el nombre completo de las personas involucradas para preservar la identidad de la menor y su derecho a la intimidad y confidencialidad, en virtud de la Convención de los Derechos del Niño (artículo 75, inciso 22 de la Constitución Nacional, Ley 23849) y las Leyes 26061 de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, y 26522 de Servicio de Comunicación Audiovisual.