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Con los tapones de punta, la canciller de Venezuela mandó a «lavarse la boca» a Malcorra por opinar sobre su país

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Con los tapones de punta, la canciller de Venezuela mandó a "lavarse la boca" a Malcorra por opinar sobre su país

A Delcy Rodríguez no le gustó que sus pares de Argentina y Chile hablaran sobre los conflictos que atraviesa el gobierno de Maduro. "Son unos vulgares", arremetió.

"Con qué cara vienen a hablar de Venezuela, yo les he dicho, y me disculpan que lo diga en estos términos, pero antes de hablar de Venezuela tienen que lavarse su boca, antes de pronunciar nuestro nombre", lanzó la canciller de Venezuela en una conferencia de prensa. El mensaje fue claro y contundente, y tenía destinatarios precisos.

Con esa frase, la ministra de Relaciones Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, exigió respeto a sus pares de Argentina, Susana Malcorra, y de Chile, Heraldo Muñoz. Les dijo además que "no tienen cara" para hacer críticas al gobierno de Nicolás Maduro.

Los cancilleres de Argentina y de Chile se reunieron el viernes en Buenos Aires y señalaron que siguen con mucha atención la situación de Venezuela. Así le dieron la bienvenida al diálogo político que se inició el domingo pasado en el país caribeño y al acompañamiento que hace el Vaticano sobre ese proceso.

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Malcorra consideró que tras el inicio de estas conversaciones "hay que sostener y mantener el que haya resultados concretos", mientras que Muñoz dijo que Chile desea "el camino de la democracia, del respeto a lo derechos humanos y del diálogo".

Rodríguez dijo hoy sobre sus colegas de Argentina y Chile: "Son unos vulgares que pretenden pronunciarse sobre nuestro país cuando ni siquiera son capaces de aceptar un reto en materia de derechos humanos". Señaló que el Gobierno venezolano "rechaza categóricamente" este tipo de "relacionamiento de irrespeto que violenta todas las normas en materia internacional" tras comentar que ayer escuchó las declaraciones de sus pares a quienes acusó de pretender convertirse "en tutores de Venezuela".

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Dijo que en Argentina y Chile supuestamente se viven "realidades terribles" y aseguró que desde la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia "han despedido a más de 200.000 funcionarios, sin contar los despidos en el sector privado" y supuestamente se ha "criminalizado la protesta". "Hay que denunciar el caso de Milagro Sala, por el simple hecho de protestar está encarcelada", dijo.

También criticó "el endeudamiento en el corto plazo que tiene el presidente Macri" al que acusó de hacer "unos escandalosos compromisos financieros que superan los 40.000 millones de dólares" que comprometen el futuro de Argentina.

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Con respecto a Chile, Rodríguez dijo que en ese país hay "brutalidad policial", "violación de los derechos humanos" y "ni hablar de los mapuches". Apuntó que "en materia de salud, millones de personas mueren en listas de espera en los hospitales de Chile, privatizada la salud, privatizada la educación, privatizadas las pensiones (…) prevalece la constitución de (Augusto) Pinochet" (1973-1990).

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