Nota principal
Tiene 3 años y sobrevivió a un bombardeo. Su foto, el rostro del dolor.
Un hermano de Omran, el nene cuya imagen cubierto de polvo y sangre en una ambulancia se volvió un símbolo de las víctimas civiles de la guerra en Siria, murió en Aleppo por las heridas del fatal bombardeo.
También perdieron la vida otros seis chiquitos de la misma familia que estaban junto a su mamá en otro ataque concretado en la misma ciudad. "Otra muerte sin sentido de un niño en Siria", escribió en Twitter, Caroline Anning, de Save The Children, mientras la Syria Solidarity Campaign, con base en Londres, habló de un "crimen de guerra".
Reports Omran Daqneesh's brother Ali has died of his injuries, sustained in the same airstrike. Another senseless death of a child in #Syria
— Caroline Anning (@CarolineAnning) 20 de agosto de 2016
El hermanito de Omran que murió se llamaba Ali y tenía diez años. El pequeño, según contó su padre al diario The Telegraph, estaba en la calle jugando con algunos amigos cuando ocurrió el bombardeo.
Omran, que tiene tres años y no 5 como se dijo en un primer momento, estaba sentado junto a su padre en un sillón que se partió por la mitad. Fue el primero en ser socorrido y llevado afuera por su padre, que luego volvió entre los escombros para sacar a otro hijo y dos hijas, que se salvaron.
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Fuentes de los activistas antigubernamentales dijeron que el ataque, ocurrido el 17 de agosto en el barrio residencial de Qaterji, había sido cometido por aviones gubernamentales sirios o rusos. Moscú respondió ayer afirmando que no llevó a cabo bombardeos en esa parte de la ciudad.
ASÍ RESCATARON A OMRAN (las imágenes de este video son extremadamente sensibles)
La historia de este nene revisita el caso de Aylan Kurdi, el símbolo de los refugiados sirios que intentan llegar a Europa. Él y su familia habían abandonado Kobani, su ciudad natal, sitiada durante meses por el grupo yihadista Estado Islámico, para intentar llegar a Canadá, donde vive una tía que podía ayudarlos.
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