Asi lo aseguró Luciana Borrelli, Medica Veterinaria y jefa de Estación de Fauna Autoctona, con la situación de aquellas personas que toman animalitos salvajes como mascotas.»No está permitida la tenencia en el domicilio porque implica un daño para el animal y en cierta forma es maltrato». Borrelli explica que son especies en cautiverio, y no se tiene en cuenta cuando se adquiere un animalito como un loro o una tortuga, desconocen que está penado por ley, pero además existe un riesgo para la salud pública porque en el caso de un mono o un Puma que pueden transmitir rabia o la toxoplasmosis qué es una enfermedad parasitaria, en el caso de los loros pueden transmitir psitacosis que deriva en una neumonía grave en el ser humano.
«Que el animal se venda como mascota quiere decir que hubo un daño ambiental antes» muchas veces se encuentran cachorros que probablemente la madre esté cerca, y cuando ven la presencia del ser humano tienden a uir y en otros casos matan a la hembra. Si se encuentra un cachorro de cualquier especie lo ideal es no tocarlo y dejarlo en su ambiente.
«Existe el caso de un cachorro de Puma de 4 meses que fue rescatado de una familia que no tenía como mascota, que debería estar aprendiendo a cazar, trepar y a sobrevivir con su madre sin embargo ahora pasara el resto de su vida en cautiverio» finalizó Luciana, ya que estuvo cautiva conviviendo con niños pequeños y perdió todas las enseñanzas y lo más peligroso perdio el miedo a los humanos. «El mascotismo nos expone a contagiarnos de enfermedades zoonóticas, los expone a morir por estrés y por mala alimentación, nos expone a los ataques, los animales silvestres, sufren dejan de cumplir su rol en el ambiente y en la gran cadena de la que forma parte».