La Secretaría de Cultura de la Ciudad de Tartagal llevó adelante el 4to Taller de Gestión de Calidad dirigido a participantes y agrupaciones del Corso Color de nuestra ciudad. En esta oportunidad, la actividad estuvo orientada a la identidad cultural y las expresiones populares de pueblos originarios, como forma de conocer y promover la cultura autóctona. El encuentro se desarrolló en el Centro Cultural de los Pueblos Originarios de nuestra ciudad.
Integrantes de las distintas agrupaciones y comparsas, compartieron experiencias y esbozaron conceptos sobre lo aprendido, haciendo hincapié en los proyectos a desarrollar para la participación del Corso Color 2023. “Este taller me pareció muy bueno porque aprendí muchas cosas”, dijo Miguel Sosa, director de Tinkus Wistus Vida (“Palo torcido” en quechua). Si bien esta agrupación es perteneciente a Argentina, el director relató que representan a Bolivia, ya que este tipo de danza es proveniente del país vecino. Sin embargo, existe un gran gusto del público tartagalense por este baile.
“Es una danza popular llena de alegría, color y movimientos, bastante pintoresca y llamativa. La agrupación está formada por 67 personas entre hombres, mujeres, adolescentes y niños de diferentes edades, que bailan desde hace 8 años y esperan participar el próximo año en el “Corso Color 2023”, expresó Sosa.
Las licenciadas Leda Kantor y Mariana Ortega, quienes coordinaron el encuentro, contaron con el aporte de alumnos del Instituto Terciario de Tartagal. Los estudiantes expusieron un video donde interpretan y representan la historia del cacique toba Taikolik, guerrero que luchó por su pueblo, para defender su territorio de las invasiones bolivianas entre el Bermejo y el Pilcomayo. Guadalupe Brizuela, una de las actrices de esta producción, explicó: “Fue una experiencia muy linda, porque así se toma conocimiento de las diversas etnias existentes, y su cultura”.
“Este video permitió conocer con mayor profundidad cómo viven la gente de la comunidad y cómo se preparan ante un ataque, además de la vida a partir de la invasiones, donde provocaron no sólo la defensa, sino también la huida de los pobladores”, explicó Brizuela, que agregó: “Participar de este film fue muy importante y una experiencia muy linda, ya que la cultura de los pueblos originarios que existe es muy rica y muchas veces no es valorada”.
