Cada 8 de noviembre de cada año se celebra el Día del Empleado Municipal en el país, donde conmemoran esta fecha con diversos festejos. En la ciudad de Tartagal su conmemoración se realizó con una misa y acto de reconocimiento a los empleados por los 25 años de servicio, encabezado por el Intendente Mario Mimessi y el Padre Fray Rubén Sica.
De este modo, el Int. Mario Mimessi, felicitó y agradeció a los empleados municipales por su día y labor para con la comunidad. “Feliz día y un agradecimiento inmenso a todos los empleados municipales, a mujeres y hombres, que conforman la familia municipal, que día a día transpiran la camiseta para que la ciudad esté más limpia, más ordenada…, y en definitiva reconociendo siempre que no hay gestión posible que tenga éxito sin el acompañamiento de la familia municipal”, expresó el intendente, y recordó también que el pasado domingo 6 de noviembre, se llevó a cabo en el Complejo Municipal, un almuerzo y un brindis como modo de festejo.
Asimismo, en dicho acto se hizo entrega de un total de 13 reconocimientos por la labor de 25 años de servicio municipal. Entre ellos, Rubén Sardina y Mariela Leañez, quienes agradecieron el reconocimiento y felicitaron a los demás colegas por el acompañamiento en el trabajo diario.
Rubén Sardina, Jefe de Tránsito, se emocionó ante tal acto y pronunció “soy hijo de un jubilado municipal, me emociona». Sardina, quien se inició en el sector de Pavimentación y posteriormente en Tránsito, les deseó a todos sus compañeros un feliz día y agradeció a Dios por este trabajo. Y también no pudo pasar por alto de las alegrías compartidas y de las despedidas a aquellos que se fueron y que ya no están, ”un abrazo al cielo para ellos”, dijo y dejó un mensaje: “Decirles que siempre defiendan la bandera municipal, que la lleven al frente porque es muy bueno tener este trabajo, somos servidores públicos, servimos a toda una comunidad, por eso contento de ser municipal”.
Por su parte, Mariela Leañez, empleada de la Oficina de Rentas, expresó “estoy muy contenta y agradecida por este reconocimiento de 25 años de servicio. Es casi toda una vida porque ingresé al municipio desde los 18 años, bien terminé el secundario, en el año 97 en la gestión de Oscar Mario Ángel. Estuve prestando servicio 2 años en la Oficina de Compras, al inicio, y luego me trasladaron a la Oficina de Rentas, y ahí quedé permanente”. También dedicó su reconocimiento a sus dos personas especiales. “Este reconocimiento se lo dedico especialmente para mis dos pilares, mis dos amores, mi madre Dorita y mi hija, Lourdes Gramajo, que siempre fueron mi sostén y apoyo incondicional”, y cerró con un mensaje para sus compañeros de trabajo: “Le mando mucho cariño y un abrazo enorme, que tengan un bendecido día, que lo pasen de lo mejor y sobre todo que Dios los bendiga siempre en la salud. Este reconocimiento es para todos ellos, por cada labor que hacen día a día, porque cada sector cumple diferentes roles, y para todos ellos, muchas felicidades en su día”.